El próximo ciclo a lo largo de la carretera escénica del país parte para el puente del río Kwae. Llegando cerca del puente que esta en este río, hay una señal que apunta a un campo con una pequeña pista de tierra. Lo recomendable es no seguir aquella pista por ningún motivo, ya que está lleno de espinas que pueden pinchar los neumáticos. A lo largo del puente hay oportunidad de sacar muchas fotos, además, por las cercanías se pueden ver elefantes.

El Puente del río Kwae todavía está en servicio hoy en día y forma parte del sistema ferroviario de Tailandia y Birmania. Este puente fue bombardeado con frecuencia durante la guerra y posteriormente fue reconstruido. Los arcos que se ven en el puente son los originales.

Bajo el puente hay un restaurante flotante que vende comida thai, además de bebidas y cerveza, aunque hay restaurantes de diferentes estilos a lo largo de la carretera Mae Nam Kwae.

En el Museo del Tren de la Muerte se pueden aparcar las bicicletas. Este museo está situado junto al cementerio de guerra Kanchanaburi. Allí hay muchos objetos interesantes que explican la construcción del ferrocarril entre Tailandia y Birmania. Cuando hayan terminado la visita por aquí, pueden echar un vistazo en el cementerio, que está al frente del museo.

Cuando vayan de regreso a la estación de tren, hay dos opciones: conseguir el tren de regreso a Bangkok o quedarse en Kanchanaburi, donde hay muchas casas de huéspedes y hoteles a lo largo de la carretera principal. Si se quedan es recomendable tomar el tren hacia la estación de Wang Po para ver el viaducto de Wang Po. En Wang Po podrán caminar por las vías del ferrocarril, al lado del acantilado, donde hay una pequeña cueva junto al viaducto en el acantilado para ver.

El famoso Wang Pho es un gran viaducto de madera construido en el acantilado por los prisioneros de guerra Britsh. La vía férrea todavía se encuentra en funcionamiento, y vale la pena recorrerla.

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