El Templo de Wat Chom Khiri Nak Phrot se encuentra en el lado sur de la ciudad de Nakhon Sawan, justo en una colina que está antes del puente sobre el río Chao Praya. Para subir la montaña hay una empinada escalera, casi infinita si se mira desde abajo, pero también hay una calle que sube, por si sólo mirar la escalera ya da algo de flojera.

En los alrededores del templo se puede alguno que otro monje, que pueden mostrarnos parte de las cosas que rodean este templo; la vista de la ciudad desde la cima de la montaña es completa, incluso se puede ver como corre el río valle abajo.

La leyenda dice que cuando los soldados birmanos Ayutthaya se despidieron por segunda vez, se construyó este templo para demostrar que el budismo era el mejor camino para conservar la fe. Las cosas más interesantes del lugar son la huella del señor Buda, y una sala de convocatoria que acostumbran llamar Bot Thewada Sang.

Durante el mes de noviembre se celebra un sentido homenaje a la huella del Buda, dejando a su paso hojas de oro. También se celebran regatas y una feria.

El lugar guarda una mística especial que sólo podrían explicar en parte los monjes que habitan por ahí, guardando celosamente los secretos de sus maestros con los que comenzaron su vida de claustro. Según la creencia, Buda se complace al sentir que posan hojas de oro sobre sus huellas, considerándolo como una ofrenda, tal como sería encender velas a algún santo, regalarle flores o joyas.

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