En las afueras de Chiang Mai, encontrarán el camino que va a Doi Suthep, que los lleva directo al zoo. Por ahí hay paisajes verdes y exuberantes, con cascadas y flujos de agua increíbles. Los cocodrilos son alimentados mientras la gente observa desde lejos, este siempre ha sido uno de los espectáculos más apetecidos de la zona. En el zoo hay toda clase de reptiles, aves y mamíferos.

Lo bueno de Chiang Mai es que tienen disponibles un mix de opciones para alojar que van desde lo más económico a lo más caro, ofreciéndose incluso tarifas mensuales en los hoteles, que son más convenientes si se quedan un tiempo prolongado, digamos que algo más de dos semanas. Lo único que cambia ahí, es el servicio, por ejemplo, les cambian las sabanas dos veces a la semana y la camarera no va a limpiar la habitación todos los días, cosa que no me molesta en lo más absoluto y es más, me molesta que entren las camareras a mi habitación, siento que solo intrusean y además tener todo impecable todo el tiempo apesta cuando estas de vacaciones.

Hacia el sur de Chiang Mai esta Lamphun, donde hay varias empresas y templos tradicionales. Lampang también es otra ciudad que atrae a muchos turistas por sus numerosos templos.

Otra ciudad cercana que debieran visitar es Chiang Rai y el paraje vírgen entre las montañas de Doi Angkhang. Saliendo desde Lampang hacia el sur, se encontrarán con Phayao, donde se puede apreciar un templo junto al lago.

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