Durante siglos en Tailandia se han creado verdaderas obras de arte artesanales, manifestadas en diferentes campos. En el país coexiste mezclando una artesanía burguesa, auspiciada por el mecenazgo de la aristocracia y otra que sirve a la gente popular.

Los artesanos desde sus inicios se han destacado por el estilo elegante y la originalidad de sus obras, aún así en los últimos tiempos muchas de estas originales obras se ven amenazadas por la producción de artesanía en serie proveniente de China, aunque la familia real continúa ayudando a la industria, gracias a lo cual esta sobrevive y satisface completamente el gusto de los turistas que llegan en busca de bellezas naturales, encontrándose con técnicas de arte milenarias, que han adquirido fama y prestigio y han revivido poco a poco una nueva época de oro para los artesanos.

Gracias al mecenazgo real se impulsó una rama de la artesanía muy minuciosa, la orfebrería, que elaboró obras de arte con detalles increíbles, de los cuales encontramos algunas muestras en el Museo de Bangkok, presentes en armas de gala, joyas con piedras preciosas y objetos de culto como las tablillas votivas y la vajilla utilizada en las ceremonias.

Los materiales más nobles que se utilizan para modelar las figuras más exquisitas, son el oro y la plata. Desde el siglo XII los orfebres comenzaron a utilizar la técnica europea del nielado, incrustando niel en el oro o la plata.

Las figuras que se han creado con el oro y la plata son impresionantes; es cosa de asomarse a observar en los templos más emblemáticos la fina decoración que los adorna y los mismos personajes sagrados que están dentro de cada uno.

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